viernes, 10 de diciembre de 2010

Venganza en estado puro

Ayer tuve el gran privilegio, dadas las fechas, de disfrutar de un merecido y rotundo día de relax. Aproveché para estar tirado prácticamente todo el día, jugar a los dardos con el primo Raffles y cenar con Eva en el chino....

Como colofón, me vi una película que se me estaba resistiendo y que descubrí hace poco por internet... una película a la que ponían por las nubes y que era de obligado visionado.

Nº 50: I Saw The Devil (Akmareul Boattda) (2010) (V.O.S.)

A menudo, el cine que viene del lejano oriente, a veces nos deja joyas que debido a varios prejuicios de la gente de a pie, pasan desapercibidas entre el pueblo llano.

Por suerte, gracias a internet y el boca a boca, uno topa de vez en cuando con maravillas como la terrorífica The Ring (Ringu), la emocionante Infernal Affairs (película que siempre diré, es superior a su remake Infiltrados) o la grandísima "trilogía de la venganza" cuyo cénit, en mi opinión, es la enorme Oldboy.

Creo que alguna vez he mencionado que me encantan las películas cuyo tema principal es la venganza, pero siempre y cuando se hagan bien... y I Saw The Devil es precisamente eso: una impresionante y durísima historia de venganza.

Para los que no sepan nada de esta película, el argumento sería el siguiente: Una chica es brutalmente asesinada por un psicópata. La chica es la novia de un agente del servicio de inteligencia koreano. Éste, no parará hasta dar caza al asesino de su novia y hacerle pagar por las atrocidades que ha cometido.

A simple vista, puede parecer un argumento bastante típico y simplón, nada más lejos tal vez... pero lo que hace grande a esta película es cómo se desarrolla esta venganza, una de las más duras y crueles que he visto en muchísimo tiempo, donde ambos protagonistas (policía y asesino) dejarán a un lado cualquier tipo de cuestión ética y moral para lograr sus objetivos y conseguir darse caza el uno al otro sin importar las consecuencias.

Rodada con un ritmo excelente, consigue mantener la atención del espectador en todo momento a pesar de su larga duración (2 horas 30 minutos) sin caer en el aburrimiento ni la monotonía en cualquier momento, pues en todo momento se genera una tensión constante en la que siempre se quiere saber qué va a suceder a continuación, sorprendiendo en ocasiones con giros muy acertados para llevar al espectador, a través de una espiral de autodestrucción a un clímax sencillamente brillante y cruel a partes iguales.

En definitiva, el público y la crítica tienen razón: I Saw The Devil es una película sensacional donde la violencia es otra de las protagonistas, una violencia cruel, explícita y prácticamente realista (muy sangrienta pero sin los artificios del gore japonés y su sangre con aspersor) con escenas que quedarán grabadas en la retina para siempre (quien haya visto Hijos de los Hombres y la escena del Mègane hallarán aquí una escena que rivaliza sin inmutarse con ésta en su factura técnica) y con dos actores soberbios (mención especial para Min-sik Choi, conocido por su papel de Oh Dae-Su en la mencionada Oldboy en el papel de uno de los asesinos más crueles que recuerdo)

Junto con Inception y sin equivocarme, lo mejor que he visto este año aunque, eso si, no apta para estómagos delicados ni todos los públicos.

Indispensable para cualquier amante del buen cine, los buenos thrillers y las historias de venganza.

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